Desde hace muchos años, los textos han formado parte de la vida de los hombres y de su legado para con la humanidad.
De diversos tipos y maneras, a través de muchos textos los individuos han transmitido e incorporado experiencias, conocimientos, cultura y religión.
Sin embargo, para comprender mejor todo esto se hace necesario partir de una cuestión elemental:
¿Qué es un texto?
La palabra texto deviene del latín textus y quiere decir “tejido” o “entrelazado”. En verdad, se emplea para hacer referencia al grupo de palabras o enunciados a través de los cuales se transmite un contenido de forma ordenada e inteligible.
De ahí que se pueda definir como texto a toda escritura o discurso mediante el cual se pretende comunicar un mensaje.
El texto se forman mediante signos, los cuales se organizan en una estructura coherente y que pueden ser interpretadas para transmitir las ideas o intensiones de quien lo escribe o pronuncia.
En su estructura ha sido definido como signo al propio lenguaje y como parte del código que emplea se destaca la lengua.
De ahí que todo texto se organice como una cadena de mensajes cifrados propuestos por el autor y que deben ser descifrados por el lector.
Características de los Textos
Entre las características o propiedades que deben tener los textos se destaca la coherencia. Esto quiere decir que las ideas del texto deben tener una conexión entre sí y responder entre todas a una idea común o central, que sería en definitiva, aquello de lo que se trata el texto.
Otra de sus características es la cohesión, lo que implica necesariamente la conexión entre sus partes.
También es necesario que el texto tenga un significado o un sentido que pueda ser recuperado por el lector o el interlocutor.
Algunos especialistas aseguran que si un texto prescinde de un sentido y un significado, se vuelve un conjunto de palabras que en ocasiones no sería posible comprender y en algunos casos dificultaría siquiera poder leerlo.
Además de lo expuesto se debe resaltar también la necesidad de que todo texto sea progresivo. Esto quiere decir que su contenido debe ir ofreciéndose poco a poco y partiendo de ideas más simples a las más complejas.
Otra característica de un texto es la intencionalidad. Esta es parte fundamental de quien escribe o pronuncia el texto; y se trata más bien de aquel propósito por el cual se escribe o emite el mensaje.
Algunos autores coinciden en establecer como otra característica la adecuación, haciendo énfasis en los códigos o preceptos del posible receptor, de modo que pueda cumplirse la intensión del mismo y el mensaje pueda ser correctamente descifrado por el público al cual va destinado.
En la redacción de textos existen diversos tipos de códigos y normativas que le imprimen un mayor o menor grado de rigurosidad.
Consecuentemente, existen textos con mayor desestructuración intencional y desapego a los criterios y patrones establecidos, por ejemplo los textos literarios; y de igual modo existen otros que deben hacer uso inevitablemente y estricto del cumplimiento de estas reglas como por ejemplo un discurso o un texto científico.
Tipos de Texto
Existen varios tipos de texto con algunas características que los distinguen entre sí. No obstante, la clasificación y/o tipificación de los mismos se mantiene en estrecha relación con la intencionalidad o el propósito del texto.
En este sentido podemos encontrar:
- Texto Informativo
- Texto narrativo
- Texto descriptivo
- Texto argumentativo
- Texto conmutativo
- Texto poético
- Texto lúdico
- Texto Periodístico
Ejemplos de textos
Pueden ser muchos los textos que leemos a diario. Formando parte de ellos se encuentran las Pancartas o carteles, las noticias que leemos en la prensa o que escuchamos en la radio y la televisión.
También están los cuentos y los libros, las cartas, las conversaciones, etc.