Pensamiento Complejo

El pensamiento complejo constituye uno de los tipos o variedades de pensamiento más estudiados en los últimos tiempos.

Se relaciona con la inteligencia y, aunque puede no estar presente en todas las personas, muchos se interesan por conocerlo y saber cómo desarrollarlo.

Precisamente por eso hemos pensado este artículo, en él estaremos compartiendo que es el pensamiento complejo, cómo podemos favorecerlo y otros elementos de interés sobre el tema ¡Síguenos!

¿Qué es el pensamiento complejo?         

El pensamiento complejo fue planteado por el filósofo francés Edgar Morin y definido como aquel que le permite al sujeto realizar operaciones mentales avanzadas y con mayor nivel de complejidad.

Gracias a este pensamiento, comprendemos los conceptos y hacemos análisis de los mismos descomponiéndolos en sus partes para su comprensión y estudio.

De ahí, que sea empleado en el estudio y la comprensión de las ideas, y de la misma manera en la reproducción de nuevas ideas a partir de éstas.

Gracias al pensamiento complejo los elementos de la realidad pueden no solo ser comprendidos y analizados sino también comparados y relacionados entre sí.

El propio Edgar definió que el pensamiento complejo puede ser considerado también el que se emplea para distinguir el papel de la ciencia en las dinámicas más complicadas de los diferentes objetos de estudio.

Características del pensamiento complejo

Según el propio creador del término, el pensamiento complejo se caracteriza por ser interdisciplinario pues requiere de varios ámbitos y conocimientos para su puesta en práctica.

Es el que se emplea para dar soluciones a problemas de gran complejidad y dificultad, ya sea en el ámbito teórico o práctico.

Mediante él se establecen las relaciones entre varios componentes y dimensiones de la realidad.

Se le reconoce un carácter globalizador, ya que busca la comprensión de todos los fenómenos y elementos en los que está inmerso.

No es innato, depende de cómo lo desarrolle cada sujeto y cómo lo ponga en práctica.

Para este tipo de pensamiento, las afirmaciones no se asumen como ciertas o inciertas, sino que insta a la búsqueda y el descubrimiento de nuevas opciones y explora qué tan verdadero es o no lo que percibe.

Habilidades del pensamiento complejo

El propio Edgar Morin definió una serie de habilidades que se requieren para el desarrollo del pensamiento complejo. Estas habilidades son:

• Razonamiento básico: consiste en la información más básica que hemos obtenido de la experiencia y la interacción con el medio.
• Razonamiento crítico: es el que permite operar con la información obtenida en el razonamiento básico, cómo manejamos y empleamos esa información para la obtención de nuevos conocimientos.
• Razonamiento creativo: es el más complejo y en él se integran todas las habilidades que ponemos en práctica en la obtención de un conocimiento nuevo. Son las habilidades más difíciles de aplicar ya que a pesar de denominarse razonamiento creativo, está directamente relacionado con el razonamiento crítico y los conocimientos y teorías deben ser demostradas y verificadas. Requiere necesariamente la presencia de los niveles anteriores para manifestarse.

¿Cómo desarrollar el pensamiento complejo?

Para desarrollar el pensamiento complejo, se sugieren a continuación algunos elementos que fueron definidos por el propio Edgar Morin y que, según su consideración, debían ser practicados por toda la población y en todas las sociedades:

• Duda ante todo conocimiento: Todo conocimiento aunque haya sido demostrado tiene un mínimo riesgo de error, de ahí que las cosas que aprendemos sean asumidas con la posibilidad de aceptar cambios y transformaciones porque no son absolutas.

• Asegura el conocimiento: Es importante identificar de toda la información que recibimos diariamente cuál es ventajosa y fidedigna y cual puede no serlo.

• Todos somos iguales: es importante partir del hecho de que la especie humana es una sola aunque está especificada en sociedades y clases, pero todos somos merecedores del mismo respeto y dignidad.

• Desarrollo en todos los aspectos: es importante entender la necesidad de desarrollo humano y social no únicamente ligada al ámbito económico, sino también afectivo, moral, científico, etc.

• Enfrentar las dudas: es importante asumir el conocimiento como algo que también puede ser incierto, para ello, hay que aprender que la incertidumbre no es ni buena ni mala, simplemente nos puede llevar a un nivel mayor de desarrollo.

• Practica: Es importante entrenarnos en la práctica de la comprensión constante. Buscar comprender cada suceso y el porqué de las cosas nos posibilita no solo poner en práctica el pensamiento complejo sino desarrollarlo a niveles cada vez más superiores.

Ejemplos de pensamiento complejo

Un ejemplo de pensamiento complejo puede ser:

• Un compañero de clases se comporta de forma extraña, es retraído, no habla con nadie, su círculo de amistades es cada vez más limitado y su aspecto raro y desmejorado. La mayoría de los compañeros se burlan de él o para otro grupo pasa desapercibido. Una persona con pensamiento complejo, busca entender el porqué de su comportamiento, se acerca, investiga, indaga y puede llegar a descubrir la causa de tales conductas.
• En el aula hubo un altercado en el que se vieron implicados varios alumnos. El director los cita a todos para escuchar sus argumentos del suceso y procura encontrar una solución adecuada y justa teniendo en cuenta las necesidades, características y diferencias de cada uno y con la cual no solo quede resuelto el problema sino que queden satisfechas las partes para evitar que ocurra nuevamente.